Por Carlos Paulino
La comunicación es el medio más eficiente que tenemos
los seres humanos para poder entendernos. La comunicación ha pasado a lo largo
del tiempo por distintas etapas que van desde los signos y señales a la comunicación
oral como un todo, luego al desarrollo de representaciones pictóricas que
degeneraron en la escritura.
Es evidente que en el proceso de comunicación
escrita la producción y percepción sean diferentes a los de la lectura. La
escritura nace de unas herramientas exclusivas que el ser humano aprende a lo
largo del tiempo con ayuda de otros, este proceso permite la duración o
permanencia en el tiempo de los grupos de signos gráficos arbitrarios (texto).
Nos interesa, en esta oportunidad, analizar los procesos
que se llevan a cabo para la implementación y desarrollo de la escritura y cómo
funciona este sistema.
La mecanización de los procesos de escritura hace
que en la relación diaria con los demás y en la misma producción de ésta
la utilicemos de forma
inconsciente.
El proceso de adquisición de la lectura pasa
primero por el reconocimiento visual de las letras sin importar el orden ni la
forma en que estén escritas, el formato no impide que el ser humano pueda
reconocer una letra determinada. El juego de representación visual no es
concreto por lo que en la memoria visual no existe color, tamaño, ni tipo de
letra. Tinker, Legibility of print, Ames, 1963.
La fonología ejerce un papel importante en el
reconocimiento de las letras y por ende en el estudio de los grafemas, ya que,
si colocamos palabras con iguales grafemas sería fácil reconocerlas si están
agrupadas entre letras con sonidos conocidos, pero no ocurriría lo mismo si los
sonidos fueran desconocidos, aunque se encontraran en estas palabras con la
misma estructura grafemática.
El reconocimiento de las sílabas es el segundo
pasos dentro del proceso de lectura, considero que uno de los más importantes
para la creación de un léxico mental.
El ser humano, en el contacto con las formas morfemáticas
busca completar la estructura del léxico mental. Esta estructura mental tiene
apartamentos los cuales tienen funciones específicas como el almacenamiento de
las palabras flexionadas haciendo así más lento el procesamiento de estas. Estas
palabras flexionadas se conocen como palabras
complejas y para poder acceder a estas se necesita un tiempo de reflexión.
Los
experimentos realizados por Günther para saber si el ser humano tiene acceso a
la raíz o a las palabras complejas; determinó que en verdad el acceso es el
mismo para ambos casos ya que los seres al leer podemos entender y que si
continuamos leyendo podremos determinar el significado de esas palabras, claro
de forma inconsciente, por poseer un léxico mental.
Es imposible que un lector pueda reconocer el
significado de una palabra sin nunca haberla oído ni tener un contacto con
esta.
Para concluir, podemos afirmar que la escritura es
un sistema mental en el cual todos sus componentes juegan un papel importante
desde los más pequeños (morfemas, lexemas) hasta la estructura completa de un
texto. En fin, para la concreción del proceso de escritura, primero se crea una
representación conceptual de las palabras que están influenciadas por el medio
y segundo para completarse se debe alcanzar el grado de comprensión de los
métodos o herramientas que se utilizan para la producción de ésta.
Para mayor comprensión leer
Medina Reguera, Ana, Procesos
Cognitivos en la recepción de
Expresiones
escritas.L.
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